Proverbios 12 & Salmo 45
- Recordatorio de Los Drs. Hood Devocional –
- 12 feb 2016
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Proverbios 12
1El que ama la disciplina ama el conocimiento, pero el que la aborrece es un necio.
2 El hombre bueno recibe el favor del Señor, pero el intrigante recibe su condena.
3 Nadie puede afirmarse por medio de la maldad; sólo queda firme la raíz de los justos.
4 La mujer ejemplar es corona de su esposo; la desvergonzada es carcoma en los huesos.
5 En los planes del justo hay justicia, pero en los consejos del malvado hay engaño.
6 Las palabras del malvado son insidias de muerte, pero la boca de los justos los pone a salvo.
7 Los malvados se derrumban y dejan de existir, pero los hijos de los justos permanecen.
8 Al hombre se le alaba según su sabiduría, pero al de mal corazón se le desprecia.
9 Vale más un Don Nadie con criado que un Don Alguien sin pan.
10 El justo atiende a las necesidades de su bestia, pero el malvado es de mala entraña.
11 El que labra su tierra tendrá abundante comida, pero el que sueña despierto es un imprudente.
12 Los malos deseos son la trampa de los malvados, pero la raíz de los justos prospera.
13 En el pecado de sus labios se enreda el malvado, pero el justo sale del aprieto.
14 Cada uno se sacia del fruto de sus labios, y de la obra de sus manos recibe su recompensa.
15 Al necio le parece bien lo que emprende, pero el sabio atiende al consejo.
16 El necio muestra en seguida su enojo, pero el prudente pasa por alto el insulto.
17 El testigo verdadero declara lo que es justo, pero el testigo falso declara falsedades.
18 El charlatán hiere con la lengua como con una espada, pero la lengua del sabio brinda alivio.
19 Los labios sinceros permanecen para siempre, pero la lengua mentirosa dura sólo un instante.
20 En los que fraguan el mal habita el engaño, pero hay gozo para los que promueven la paz.
21 Al justo no le sobrevendrá ningún daño, pero al malvado lo cubrirá la desgracia.
22 El Señor aborrece a los de labios mentirosos, pero se complace en los que actúan con lealtad.
23 El hombre prudente no muestra lo que sabe, pero el corazón de los necios proclama su necedad.
24 El de manos diligentes gobernará; pero el perezoso será subyugado.
25 La angustia abate el corazón del hombre, pero una palabra amable lo alegra.
26 El justo es guía de su prójimo, pero el camino del malvado lleva a la perdición.
27 El perezoso no atrapa presa, pero el diligente ya posee una gran riqueza.
28 En el camino de la justicia se halla la vida; por ese camino se evita la muerte.
Salmos 45
Al director musical. Sígase la tonada de «Los lirios». Masquil de los hijos de Coré. Canto nupcial.
1 En mi corazón se agita un bello tema mientras recito mis versos ante el rey; mi lengua es como pluma de hábil escritor.
2 Tú eres el más apuesto de los hombres; tus labios son fuente de elocuencia, ya que Dios te ha bendecido para siempre.
3 ¡Con esplendor y majestad, cíñete la espada, oh valiente! 4 Con majestad, cabalga victorioso en nombre de la verdad, la humildad y la justicia; que tu diestra realice gloriosas hazañas. 5 Que tus agudas flechas atraviesen el corazón de los enemigos del rey, y que caigan las naciones a tus pies. 6 Tu trono, oh Dios, permanece para siempre; el cetro de tu reino es un cetro de justicia. 7 Tú amas la justicia y odias la maldad; por eso Dios te escogió a ti y no a tus compañeros, ¡tu Dios te ungió con perfume de alegría! 8 Aroma de mirra, áloe y canela exhalan todas tus vestiduras; desde los palacios adornados con marfil te alegra la música de cuerdas. 9 Entre tus damas de honor se cuentan princesas; a tu derecha se halla la novia real luciendo el oro más fino.
10 Escucha, hija, fíjate bien y presta atención: Olvídate de tu pueblo y de tu familia. 11 El rey está cautivado por tu hermosura; él es tu señor: inclínate ante él. 12 La gente de Tiro vendrá con presentes; los ricos del pueblo buscarán tu favor. 13 La princesa es todo esplendor, luciendo en su alcoba brocados de oro. 14 Vestida de finos bordados es conducida ante el rey, seguida por sus damas de compañía. 15 Con alegría y regocijo son conducidas al interior del palacio real.
16 Tus hijos ocuparán el trono de tus ancestros; los pondrás por príncipes en toda la tierra.
17 Haré que tu nombre se recuerde por todas las generaciones; por eso las naciones te alabarán eternamente y para siempre.