Proverbios 13 & Salmo 45
- | Recordatorio de Los Drs. Hood Devocional –
- 13 jul 2016
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Proverbios 13Nueva Versión Internacional (NVI)
13 El hijo sabio atiende a la corrección de su padre, pero el insolente no hace caso a la reprensión.
2 Quien habla el bien, del bien se nutre, pero el infiel padece hambre de violencia.
3 El que refrena su lengua protege su vida, pero el ligero de labios provoca su ruina.
4 El perezoso ambiciona, y nada consigue; el diligente ve cumplidos sus deseos.
5 El justo aborrece la mentira; el malvado acarrea vergüenza y deshonra.
6 La justicia protege al que anda en integridad, pero la maldad arruina al pecador.
7 Hay quien pretende ser rico, y no tiene nada; hay quien parece ser pobre, y todo lo tiene.
8 Con su riqueza el rico pone a salvo su vida, pero al pobre no hay ni quien lo amenace.
9 La luz de los justos brilla radiante, pero los malvados son como lámpara apagada.
10 El orgullo sólo genera contiendas, pero la sabiduría está con quienes oyen consejos.
11 El dinero mal habido pronto se acaba; quien ahorra, poco a poco se enriquece.
12 La esperanza frustrada aflige al corazón; el deseo cumplido es un árbol de vida.
13 Quien se burla de la instrucción tendrá su merecido; quien respeta el mandamiento tendrá su recompensa.
14 La enseñanza de los sabios es fuente de vida, y libera de los lazos de la muerte.
15 El buen juicio redunda en aprecio, pero el camino del infiel no cambia.
16 El prudente actúa con cordura, pero el necio se jacta de su necedad.
17 El mensajero malvado se mete en problemas; el enviado confiable aporta la solución.
18 El que desprecia a la disciplina sufre pobreza y deshonra; el que atiende a la corrección recibe grandes honores.
19 El deseo cumplido endulza el alma, pero el necio detesta alejarse del mal.
20 El que con sabios anda, sabio se vuelve; el que con necios se junta, saldrá mal parado.
21 Al pecador lo persigue el mal, y al justo lo recompensa el bien.
22 El hombre de bien deja herencia a sus nietos; las riquezas del pecador se quedan para los justos.
23 En el campo del pobre hay abundante comida, pero ésta se pierde donde hay injusticia.
24 No corregir al hijo es no quererlo; amarlo es disciplinarlo.
25 El justo come hasta quedar saciado, pero el malvado se queda con hambre.
Salmos 45 Nueva Versión Internacional (NVI)
Al director musical. Sígase la tonada de «Los lirios». Masquil de los hijos de Coré. Canto nupcial.
1 En mi corazón se agita un bello tema mientras recito mis versos ante el rey; mi lengua es como pluma de hábil escritor.
2 Tú eres el más apuesto de los hombres; tus labios son fuente de elocuencia, ya que Dios te ha bendecido para siempre.
3 ¡Con esplendor y majestad, cíñete la espada, oh valiente! 4 Con majestad, cabalga victorioso en nombre de la verdad, la humildad y la justicia; que tu diestra realice gloriosas hazañas. 5 Que tus agudas flechas atraviesen el corazón de los enemigos del rey, y que caigan las naciones a tus pies. 6 Tu trono, oh Dios, permanece para siempre; el cetro de tu reino es un cetro de justicia. 7 Tú amas la justicia y odias la maldad; por eso Dios te escogió a ti y no a tus compañeros, ¡tu Dios te ungió con perfume de alegría! 8 Aroma de mirra, áloe y canela exhalan todas tus vestiduras; desde los palacios adornados con marfil te alegra la música de cuerdas. 9 Entre tus damas de honor se cuentan princesas; a tu derecha se halla la novia real luciendo el oro más fino.
10 Escucha, hija, fíjate bien y presta atención: Olvídate de tu pueblo y de tu familia. 11 El rey está cautivado por tu hermosura; él es tu señor: inclínate ante él. 12 La gente de Tiro vendrá con presentes; los ricos del pueblo buscarán tu favor. 13 La princesa es todo esplendor, luciendo en su alcoba brocados de oro. 14 Vestida de finos bordados es conducida ante el rey, seguida por sus damas de compañía. 15 Con alegría y regocijo son conducidas al interior del palacio real.
16 Tus hijos ocuparán el trono de tus ancestros; los pondrás por príncipes en toda la tierra.
17 Haré que tu nombre se recuerde por todas las generaciones; por eso las naciones te alabarán eternamente y para siempre.